La restauración de esta vivienda unifamiliar en el municipio de Cudillero (Asturias) afecta solamente a la distribución interior, huecos de fachada y acabados. Con la reforma efectuada, se amplía la vivienda ocupando el cuerpo del garaje, que pasa a ser ahora salón-comedor, y el cuerpo del depósito de agua, donde se aloja la nueva escalera. En la planta baja se localizaban las áreas comunes, el baño, un garaje y un depósito de agua, este ultimo con altura de dos plantas, adosados a la vivienda. En la planta superior se situaban los dormitorios y un corredor.

El acceso se hace ahora a través de un espacio multifuncional que hace las veces de distribuidor, sala de estar y comedor de diario. La cocina, el salón-comedor, un aseo y un dormitorio completan la planta baja. En la planta primera se sitúa el resto del programa propuesto por el promotor, cuatro dormitorios y un baño, manteniéndose el corredor.

El arranque de la escalera se sitúa en el salón, lo que refuerza el flujo entre las diversas zonas comunes. Se forma así un espacio único en el que los limites de las diferentes estancias se diluyen a través de los huecos que aquí y allá se abren entre ellas.

Restauración de la fachada

Por lo que respecta a la fachada, las reformas son las siguientes: se cambia el acceso principal, situado ahora en un lateral de la antojana, para compartir la pared frontal de la misma, con una ventana que se desplaza. En el cuerpo que antes ocupaba el garaje se abre una nueva ventana y lo que antes eran el portón y una puerta lateral ciegas se convierten en elementos acristalados. Para iluminar las escaleras, se rasgan dos huecos verticales en la pared del lado este del volumen que las contiene.

Se elimina el chapado de piedra de líneas de forjado y esquinas, dejando al descubierto la piedra original en el volumen del salón, en el que interiormente se deja vista la estructura de madera y alguna de las paredes, y en los muros laterales de la antojana.