Dolmen Arquitectos diseña un edificio de viviendas en Gijón como un bloque aislado en una parcela con un fuerte desnivel entre sus dos frentes a calle. Esto último, junto con la búsqueda de la mejor orientación y vistas, condiciona el resultado final.

La parcela de proyecto presenta una forma irregular y frentes a calles entre las que existe una diferencia de cota de seis metros. La ubicación del bloque de viviendas en ella está marcada desde un inicio por medio del área de movimiento indicada en el Estudio de Detalle en vigor, e incorporado al nuevo PGO de Gijón.

Según esto, el edificio se situará ocupando un rectángulo de 45 x 14 metros alineado con el edificio ya existente que se sitúa en la calle José María Martínez en la parte más alta de la parcela. El resto del espacio libre será ocupado por el sótano bajo rasante destinado a garaje del edificio y por las zonas comunes exteriores sobre él.

En lo que respecta al volumen del edificio se inserta en la parcela buscando el mejor acomodo de todas sus plantas en relación con las rasantes siempre con la idea de no generar banqueos en el sentido longitudinal. De esta manera, se ubican los diferentes niveles resultando plantas de vivienda y de garaje con alturas libres superiores a las habituales que se van retranqueando en altura desde su planta baja-semisótano hasta su planta tercera.

Cómputo de plantas desigual entre calles

La diferencia de cota entre la calle José María Martínez y la calle privada inferior genera un cómputo de plantas desigual entre ambas, de tal forma que la planta baja del edificio desde el este es el semisótano desde el vial principal. Lo mismo ocurre con la planta de acceso al edificio, que se sitúa a nivel de la calle Jose María Martínez, pero su altura se corresponde con una planta segunda desde el lado contrario.

Este escalonamiento tiene en cuenta la limitación de alturas de la ordenanza de baja+3+ático, de tal forma que, para evitar un cómputo superior por el lado este, se evita lo que sería una planta ático desde la rasante superior.

En cualquier caso, dicho escalonamiento supone el punto de partida del diseño del edificio ya que da lugar a los retranqueos entre las plantas que van decreciendo en altura y que favorecen la creación de terrazas que, junto con sus vuelos, dan movimiento a la fachada principal o fachada este.

Terrazas y viviendas con azotea

Se plantea una situación de dichas terrazas de forma que se solapen lo menos posible generando zonas de mejor soleamiento teniendo en cuenta que se orientan al este, donde se sitúan las mejores vistas. En el caso de última planta o planta tercera, las viviendas tendrán acceso a espacios exteriores tipo azotea.

Programáticamente, el edificio se distribuye en seis niveles. El inferior o planta sótano es el destinado al garaje de vehículos y su acceso se produce a través de vial privado situado en la rasante inferior de la parcela. Su cota se rebaja ligeramente para conseguir que la parte de su superficie situada fuera de la proyección del resto de plantas se encuentre enteramente bajo la rasante del terreno.

Se trata de un garaje con una única salida de planta o escalera de evacuación y en el que apenas existen trasteros al situarse estos en la planta superior o planta semisótano.

En esta última, también denominada planta baja, se ubican el resto de trasteros y seis viviendas. Los primeros ocupan la zona situada bajo rasante en la parte oeste y las viviendas se sitúan dando frente a la fachada este donde, gracias al desnivel de la parcela, es posible el diseño de unas terrazas-jardín exteriores.

Por encima de la anterior planta baja-semisótano se sitúa la planta de acceso cuya altura se sitúa para adaptarse a la rasante de la calle José María Martínez evitando los banqueos o diferencias de nivel en su interior. La altura de esta planta es la máxima posible según ordenanza debido a la necesidad de separar las viviendas de la siguiente planta de la acera pública y aportarles mayor privacidad.

Aparcamiento de bicis y espacio comunitario