Vivienda unifamiliar aislada en Cudillero, Asturias

Tres dormitorios en una sola planta respetando las pautas de la arquitectura tradicional asturiana, pero de acuerdo a los nuevos tiempos

Este proyecto de construcción de una vivienda unifamiliar aislada en Salón (Cudillero, Asturias) está concebido para dar cabida a una familia. La vivienda se compone de un dormitorio principal, dos dormitorios y un despacho que pueda convertirse en un momento dado en otro dormitorio extra para invitados.

Para conseguir el aprovechamiento máximo de las vistas que ofrece la parcela, pero cerrándose en la medida de lo posible a la edificación existente al oeste, en la parcela anexa, se propone una vivienda completamente abierta a las visuales con orientación sur-oeste, siguiendo una geometría en forma de «L».

Además de la orientación de las propias estancias buscando el aprovechamiento de las vistas y de la luz solar sur-oeste, se crean también espacios cubiertos exteriores, que puedan ser usados en épocas estivales.

El acceso a la parcela por el norte permite generar un amplio camino de acceso que permite la entrada directa a la vivienda.

Vivienda de una planta

El programa interior de esta vivienda en Cudillero se organiza en una sola planta, situando en la parte de la «L» abierta a las vistas, y donde se ubican los porches, tanto el dormitorio principal como los otros dos dormitorios con los que cuenta la vivienda, así como la zona de estar y el comedor. En el otro extremo se sitúan las zonas húmedas y el área de «servicio», así como la entrada.

La composición formal de la vivienda sigue las pautas de la vivienda tradicional asturiana, pero adaptándose a los nuevos tiempos. Se disponen cubiertas a dos aguas, desplazando ligeramente la limatesa hacia las zonas donde interesa disponer de mayor altura. En la zona del salón el techo sube con respecto al resto de la vivienda, generando así una zona de mayor altura, dotando de amplitud a esta estancia.

Un muro de piedra que sirve de cerramiento recorre la vivienda longitudinalmente y se introduce en el interior, quedando visto en el salón. Los demás cerramientos son de acabado blanco, generando así un contraste entre la teja de las cubiertas y el muro de piedra.

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